¿Cómo cobrar una deuda por las malas, sin perderlo todo?
Cuando llevamos tiempo detrás de un cliente moroso para que nos abone una deuda pendiente, puede llegar un momento en el que la desesperación se apodere de nosotros, y busquemos fórmulas para cobrar una deuda por las malas. Especialmente cuando la viabilidad de nuestra empresa depende en gran parte del pago de esa deuda.
Sin embargo, hay que tener paciencia y mantenerse cautos, ya que cobrar una deuda por las malas podría llevarnos a incumplir la legalidad, teniendo que enfrentarnos a problemas más graves. Dicho de otra forma, podría ser peor el remedio que la enfermedad.
Lo más sensato en estos casos, es ponerse en manos de profesionales especializados en el cobro de facturas impagadas, para que tomen las medidas pertinentes, siempre dentro de la legalidad, y busquen la solución para el cobro de la deuda en el menor tiempo posible.
Pero por si acaso, conscientes de que la desidia, las mentiras y las malas formas de los deudores pueden llegar a desesperarnos, a continuación, te mostramos los errores que sí o sí debes evitar cometer al tratar de cobrar una deuda por las malas, para no acabar perdiéndolo todo.
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No hay que caer en el acoso
Podemos insistir al deudor para que nos pague la deuda, pero no debemos caer en el acoso, puesto que está tipificado por el código penal, pudiendo ser castigado con una pena de prisión de entre tres meses y dos años.
Con acoso nos referimos a actuaciones como llamar constantemente al deudor o perseguirle físicamente allá donde vaya, entre otras.
Prohibidos los insultos
Debemos armarnos de paciencia, ya que por mucho que el deudor se lo merezca, no podemos insultarle, así como ofender, amenazar, injuriar o coaccionar.
Hay que tener en cuenta que insultar es un delito, por lo que si insultamos al deudor no solo continuaríamos sin cobrar nuestra deuda, sino que además podríamos ser sancionados con una multa.
No debemos agredir físicamente
Por supuesto tampoco podemos agredir físicamente al deudor, ya que lo único que conseguiríamos es pasar unos días en el calabozo, alargando aún más el cobro de la deuda.
Injuriar por Internet no es válido
Mucha gente se apoya en Internet, redes sociales y foros para injuriar al deudor, lo que es un grave error, ya que este podría denunciarnos por injurias. No te dejes llevar por la ira y no cometas un error que podría salirte caro.
Rendirse no es una opción
Aunque podamos llegar a valorar la posibilidad de tirar la toalla, rendirse no es una opción en cuanto al cobro de deudas se refiere.
Por mucho tiempo que haya pasado, e incluso si se ha agotado la vía para reclamar la deuda judicialmente, es nuestro dinero y debemos hacer todo lo posible por recuperarlo.
Si te encuentras en esta situación y has caído en la desesperación por cobrar una deuda, contacta con nosotros y te ayudaremos a recuperar tus deudas de una manera profesional.